
Contaba la aguela que habia un niño en La Peza que le pegaba a su madre.
Se murio y lo enterraron en una tumba del cementerio de Lapeza. Pues el niño sacaba la mano de la tumba.
La madre se lo comento al cura y este le dijo: " pegale un guantazo, veras como se mete para dentro" .